dissabte, 27 de març del 2010

Pequeña llamada a la tolerancia

La fe es tan personal como el amor que sentimos hacia personas o cosas. Nadie puede obligarnos a creer en algo sobrenatural, así como tampoco se nos ha de imponer amar a alguien o cosa.

¿Por qué las religiones tienden a la imposición? Si dicen que el amor, aparte de la creencia en el dios, es lo fundamental, ¿por qué desde los templos se insiste en afirmar que los que tienen otra creencia son malos? Eso es odiar, y los escritos de cada religión buscan precisamente, para alcanzar el reino de la divinidad, el sentimiento contrario.

Por eso, desde este humilde y breve escrito, llamo a la tolerancia de religiones. Si tú crees que hay un dios o varios moviendo nuestras vidas, de acuerdo. Tus ideas son respetables siempre y cuando tu comportamiento no las nuble. No hay motivo por el que atacar a los demás por tener opiniones diferentes.

Si, por el contrario, piensas en discriminar a otros por su fe, estarás obrando al contrario de como el tu religión te piden que actúes. Estarás contradiciendo el prototipo de buena persona.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada